Se ha hablado innumerables veces de cómo las sociedades son producto de las familias que forman parte de ella. Pero así como tenemos familias funcionales y disfuncionales dentro una sociedad también encontraremos sus equivalentes en empresas dentro de las economías.
Permíteme te comparto porque en mi opinión la empresa es el núcleo de la economía.
Siguiendo la analogía de las familias funcionales y disfuncionales, entendamos por esto que las primeras son las que tienen una comunicación clara, hay disciplina, apoyo físico, emocional y espiritual, permitiendo el crecimiento de sus individuos. Y que las segundas son las que tienen comportamientos contrarios e inmaduros que limitan el crecimiento personal de sus integrantes y su capacidad por relacionarse con su entorno.
Tenemos empresas que son funcionales donde los colaboradores y líderes están involucrados, se ponen la camiseta para que esta salga adelante y los clientes recompensan esta labor con la lealtad a la misma. Esta lealtad a la empresa brinda como resultado empresas que son estables y tienen capacidad de crecimiento. Son las empresas donde los trabajadores buscan conseguir un empleo por el ambiente laboral y las oportunidades de crecimiento.
Por el otro lado tenemos empresas disfuncionales donde los colaboradores y líderes tienen agendas propias, no se ponen la camiseta para ayudar al prójimo e incluso obstaculizan que otros le ayuden. Si bien, estas empresas pueden tener una base de clientes que les dé cierta estabilidad, usualmente son las empresas que por situaciones del entorno económico y de mercado siguen vivas, son las empresas donde usualmente los empleados entran porque tienen que trabajar y se salen a la primera oportunidad.
Si queremos economías productivas, en mi opinión debemos de tener mas empresas funcionales que disfuncionales. No podemos evitar tener empresas disfuncionales, pero sí podemos crear más empresas funcionales.
El emprendimiento y la educación, considero son parte clave para brindarle a la economía empresas que brinden soluciones a problemas y necesidades tanto actuales como futuras.
A la economía no le interesa si eres hombre o mujer, si emprendes en lo individual o en equipo. A la economía le interesa que participes, que mantengas un flujo de operaciones que permita mantenerte y crecer, así como que ayudes a otras empresas a repetir el mismo proceso.
Es por ello que, a mayor número de empresas funcionales existan dentro de una economía brindando soluciones a los problemas y necesidades de los clientes, estos gustosos pagarán por ello sin problema. Con esto habrá mas empleados que formarán parte de ambientes laborales positivos donde al final del día regresarán a casa con una actitud de satisfacción para seguir creciendo dentro de su entorno familiar.